Reconecta con la naturaleza y planta un huerto
El pasado fin de semana hicimos una escapada a la montaña, aprovechamos que hacía buen tiempo para que nos diera un poquito el aire y empaparnos de la energía del sol y del bosque. Por Asturias a la mínima que sale el sol tenemos que aprovecharlo porque es algo caro de ver. Fue algo pensado en el momento sin mucha premeditación así que optamos por improvisar un picnic, en ese momento importaba más el salir de casa a despejar y disfrutar que en preparar nada muy elaborado de comida, como te comentaba el otro día en el post de la regla del 80/20 a veces hay que dejarse llevar y saltarse algunas rutinas.
Preparé una buena ensalada, unos bocadillos y fuimos a comprar unas bebidas para todos. Dentro de lo que había nos decantamos por la opción que más nos convenció y bajo petición popular (éramos varias personas), así que unos granini fue la decisión final, cogimos uno de tomate, piña y zanahoria con vitaminas C y E, y otro de zanahoria y naranja con Vitaminas A, C y E que fue el que más gustó a los peques. Son muy ligeros en cuanto a textura, lo que hace que no sean nada pesados, y los sabores son intensos y naturales, notas perfectamente qué ingredientes llevan. A mi el de tomate, piña y zanahoria personalmente me encantó, al principio no sabía si esa mezcla iba a convencerme pero me sorprendió positivamente.
El día nos sentó de maravilla, ¿sabías que hay una terapia que se llama Shinri-yoku o la medicina del bosque? Cada año millones de japonés afectados por el mal de la vida actual (estrés, ansiedad, nerviosismo,…) se escapan a practicar la terapia del bosque en alguno de los 48 centros oficiales de la Agencia Forestal de Japón. La terapia consiste simplemente en pasear por el bosque, disfrutar de las vistas, practicar la respiración consciente y estar en contacto con la naturaleza. Y quizás me digas que es algo que de simple parece absurdo, pero algo que era normal y ordinario hace algunas décadas, es ahora algo extraordinario, olvidado y poco practicado actualmente.
El simple hecho de escaparnos con amigos a la montaña, montar un picnic y disfrutar nos llenó de energía para toda la semana. Por cierto, los granini de la Huerta tuvieron mucho éxito. Carla suele tomar otras cosas en casa pero es cierto que cuando va de excursión o tiene un día fuera de campamento, este tipo de bebidas nos encajan muy bien por prácticas y ricas. También son una buena opción en épocas de verano que marchamos todo el día fuera.
Hablando de Huerto Urbano, uno de mis propósitos este año es crearme un pequeño huertecito en casa en el que plantar algunas cosas básicas así que estoy empezando a recopilar información que pronto compartiré contigo. Creo que además puede ser una actividad divertida a realizar con la peque. ¿has tenido tu alguna experiencia con huertos urbanos?
Por cierto, te dejo información sobre una promoción precisamente relacionada con este tema del Huerto Urbano que descubrí al comprar las botellas de granini por si puede ser de tu interés:
En el cuello de cada botella encontrarás un código con 8 dígitos que puedes introducir en la página graniniplantaunhuerto.com. Al hacerlo podrás conseguir:
- Un Kit Minimaceta que incluye: una minimaceta de barro + semillas + taco de tuna.
- Huerto Urbano de madera tratada que permite el cultivo vertical.
Compártelo